lunes, 30 de marzo de 2015

RUTA GIJON – PARQUE DE LA PROVIDENCIA (PARQUE DE SAN LORENZO).


Día: 29-03-2015.

Distancia: 12,290 Km.

Duración: 4 horas (en plan tranquilo).

Desnivel: 200 metros.

Comentario:
Con el día que se presentaba en Asturias era inevitable salir a dar una vuelta y cuando me dijeron que saliera yo solo, no lo dudé, así que pensando en alguna rutilla fácil ya que tampoco estaba para muchos trotes después del día anterior en el que había realizado una tirada larga de 26 km, se me ocurrió la idea de plasmar en fotos la ruta que iba en suave paseo desde Gijón hasta el Parque de la Providencia.

Mapa de la ruta.


Aparqué el coche en la recta anterior al Estadio del Molinón ya que el aparcamiento del estadio se iba a encontrar lleno (había “rastro” en Gijón como suele ser habitual todos los Domingos), tal como pude comprobar momentos después.

Nada más salir del coche ya me aparecería la opción de ir por la acera o por senda, escogiendo finalmente la acera…


La acera va pegada algún metro por encima a esta senda por la que habitualmente circulan corredores, caminantes y gente en bicicleta.
Dicha senda le puede llevar a cualquiera que la coja a circuitos en los que se puede hacer tranquilamente una veintena de km sin demasiados problemas, alternando unos y otros (ideales para entrenar de cara a pruebas de distancias largas como Medias Maratones y Maratones).

En esta imagen se ve la senda junto al anillo navegable del río Piles y en la que a veces se ven los diferentes piragüistas que integran la sección de piragüismo del Grupo Cultura Covadonga, grupo que se ha convertido en la principal entidad de la ciudad y de Asturias con unas instalaciones que ocupan 83.000 m cuadrados, 1600 deportistas federados para 19 secciones deportivas, 5500 personas inscritas en las diferentes actividades y 33.253 socios (treinta mil…, ¡no es un error!, sí… ¡treinta mil!...).
También se ve el velódromo e hipódromo Internacional de la ciudad y lugar donde suele acabar la carrera de Nochebuena que se celebra todos los años en Gijón (este 2015 acabará aquí la Media Maratón de Gijón por encontrarse Las Mestas en obras).


El paseo continuaba dando entrada a la glorieta que da acceso, por esta parte, al aparcamiento del estadio de la ciudad o llamada “ Glorieta de la Guía”y en la que se encuentran la figura de una familia observando la unión de los dos tramos del circuito fluvial para piragüismo, recibiendo dicha escultura de bronce el nombre de “Sentimientos”.


El aparcamiento del estadio se encontraba lleno por ser Domingo y por celebrarse en sus inmediaciones el multitudinario “rastro gijonés” de todos los domingos.

Pillé entonces, después de la glorieta anterior, la senda peatonal que me iba a llevar hasta el paseo de la playa y en la que todo momento se va al lado del Río Piles y paralela a una senda ciclista.


Pasé al lado del famoso “kilometrín” (actualmente en obras), en la que el menda suela correr habitualmente cuando se acerca a Gijón a entrenar por ser este circuito bastante cómodo para las piernas.

Actualmente lo están ampliando para hacerlo de 1 km justo ya que hasta la fecha su longitud era de unos 980 metros.

Un par de imágenes de dicho circuito.




Vista atrás de este tramo recorrido en el que se puede apreciar la senda asfaltada para caminar, a su lado la senda ciclista y a su izd el tramo de tierra que forma el famoso “kilometrín”.


Llegué a los pocos metros al puente sobre el Piles y en el cual la vista se abría para la zona de la playa y en la que la afluencia de público era más que notable por ser Domingo y por el buen día que hacía.

Un par de vistas de dicha playa.




Una vez en el paseo tiré para la izda y seguí paseando en plan tranquilo por el mismo.
A medida que fui pasando las últimas terrazas y el paseo se alejaba del puente, iba disminuyendo la gente que se veía pasear por la zona, pero aunque en la segunda foto se ve poca gente, puedo decir que gente había y bastante como se puede observar en esta primera.




Las esculturas que se ven en esta segunda foto reciben el nombre de “Sombras de luz” y popularmente son conocidas como “Las Chaponas” y son cuatro láminas de acero que señalan los cuatro puntos cardinales.

Imagen, sacada de Internet, de esta escultura.


Según iba caminando la bahía de Gijón se presentaba de esta manera.


Y el paseo continuaba en busca de la zona del Sanatorio Marítimo y en la que se ve el pedrero de la Playa de los Mayanes y al fondo dicho sanatorio.


Vista atrás de dicha playa y del paseo por encima de esta playa de Los Mayanes (Gijón poco a poco se iba alejando).


El propio paseo marítimo, tras 1.200 m, desembocaba en la plazoleta donde está situada uno de las esculturas más típicas de Gijón, la escultura de la “Madre del Emigrante”, que se convirtió en la primera obra escultórica de lenguaje moderno instalada en un espacio público de Gijón, allá por 1970 y fue fruto de un vivo debate en aquellos años dado el espíritu transgresor que mostraba.

Dicha escultura tiene un fuerte sentido simbólico ya que la imagen que ofrece es de una madre que mira al mar, hacia el que alcanza desgarradoramente una de sus manos.
El autor de la escultura (Muriedas), intentó plasmar en ella el sufrimiento de las madres gijonesas y asturianas que vieron como sus hijos debían partir en busca de una vida mejor.


A partir de esta plaza, aparecía el verde Parque del Rinconín durante unos centenares de metros y su playa llamada del Cervigón o del Rinconín.


La pequeña entrada que hace el mar en esta playa y en la que en marea baja salen a la superficie diversas rocas que aparecen totalmente sumergidas durante la marea alta y zona de baño que frecuente varias veces cuando era guaje (a lo lejos se ve la zona de merendero donde pasábamos la familia algunos Domingos).


A partir de este parque acababa el paseo marítimo y empezaba una senda de tres metros de anchura que me iba a llevar hasta el Parque de la Providencia.

Antes de empezar por la senda pude apreciar la escultura de acero inoxidable conocida como “Solidaridad”, escultura con un peso de tres toneladas y media y la cual significa unión, pero a su vez también significa libertad ya que los eslabones de la cadena están abiertos, no perdiendo su independencia.

Imagen de dicha escultura.


Despidiéndome de Gijón y de su paseo marítimo.


Un lugar “muy especial” para mí…


Recuerdos de infancia con el merendero que frecuentábamos en los 80 la familia y en la que se ve la puerta por la que dejábamos atrás dicho merendero (después eso sí, de hacer “la puñetera” digestión) para bajar a bañarnos al mar.


Otra imagen de la Playa del Rinconín.


Y Gijón a lo lejos…


La senda tras pasar por la zona del merendero y del camping situado al lado mismo de éste, daba un giro de 90 grados y torcía al Este para ir en busca de una buena subida que me iba a elevar unas cuantas decenas por encima del nivel del mar.

Inicio de la subida y en la que se puede ver un conjunto escultórico con 9 bloques de mármol y en la que la gente se suele sentar para contemplar el mar y el paisaje.


Hasta aquí el sendero que había cogido recibe el nombre de Sendero del Cervigón, pero a partir de ahora y una vez que iba a pasar el camping, recibe el nombre de “Camino de los Arces”.

Dejando atrás Gijón y a lo lejos se pueden ver las cumbre nevadas de la Sierra del Aramo con la Peña Rueda bastante nevada a su izda.


La senda continuaba en subida, subida que no noté mucho por el ritmo pausado con paradas incluidas cada poco para sacar fotos y al poco tiempo iba aparecer el destino del día, El Parque de la Providencia con su conocido mirador en forma de silueta de barco (pto rojo).


La costa y el mirador a medida que me iba aproximando al parque que lo alberga.


Tras la subida de algo menos de 1 km, la senda empezaba a descender y aparecía ante mí un área recreativa en la que había algunas mesas ocupadas con gente pasando el día.


La senda descendía un corto tramo hasta la zona del bar de la Playa de Peñarrubia, encontrándose actualmente dicho bar cerrado (hecho que me extrañó…).
La senda continuaba pero la misma se encontraba bloqueada por tema de obras por una alambrada.


Si quería continuar con la excursión, no tenía más opción que saltar las protecciones de madera, así que eso fue lo que hice…

La senda descendía un cortísimo tramo para afrontar de nuevo una buena subida en la que poco a poco iría ganando metros y con vistas hacia atrás del bar que he comentado anteriormente, la Playa “nudista” de Peñarrubia y a lo lejos Gijón.


Finalizaba este tramo de senda, saliendo entonces el Parque de la Providencia y ya con vistas al mirador.

Pero antes de salir al parque en cuestión, una mirada diferente a la Playa de Peñarrubia con la senda que me había traído hasta aquí.


Salí a este Parque de la Providencia, parque situado sobre antiguos terrenos militares y que fueron recuperados para el ocio y disfrute de la gente, siendo inaugurado en 1997.

Ahora el parque aparecía con diferentes sendas asfaltadas, así que poco a poco fui subiendo al mirador en forma de buque que había visto bastante tiempo antes.

Un par de imágenes según iba subiendo.




Subí a lo más alto del mirador y desde donde se podían apreciar vistas como ésta.


Estuve poco más de 5 minutos y entonces emprendí el regreso a Gijón, echando un último vistazo a donde había estado momentos antes.


Regresé por el mismo camino de la ida, enlazando de nuevo con el paseo marítimo y despidiéndome de la Playa del Rincónín en un último vistazo.


Luego daría una pequeña vuelta por Gijón para ir regresando poco a poco al coche, con parada previa a tomar una caña dado lo sediento que estaba.

Buena jornada en plan relax para soltar piernas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario